Este jueves, cientos de personas marcharon en Culiacán, Sinaloa, para exigir justicia por el asesinato de los hermanos Alexander y Gael Antonio Sarmiento Ruiz, víctimas de un ataque armado ocurrido el pasado domingo.
La protesta inició a las 8:30 de la mañana, con alumnos, docentes y familiares de las víctimas recorriendo la calle José Aguilar Barraza y la avenida Álvaro Obregón hasta llegar al Palacio Municipal. Vestidos de blanco y con globos en mano, los asistentes clamaron por un alto a la violencia que enluta al estado y la renuncia de Ruben Rocha Moya.
El trágico suceso ocurrió el pasado domingo 19 de enero de 2025, en el fraccionamiento Los Ángeles. Antonio de Jesús Sarmiento y sus hijos viajaban en un vehículo cuando fueron interceptados por sicarios que intentaron despojarlos del automóvil. En el lugar, Antonio y su hijo mayor, Gael Antonio, de 12 años, perdieron la vida. Alexander, de nueve años, fue trasladado al hospital junto con otro menor, su primo, quien sigue en estado crítico. Sin embargo, Alexander sucumbió a las heridas el martes por la tarde, lo que desató una ola de indignación y luto en la comunidad.
“Alexander lamentablemente perdió la vida. Esto es el resultado de un gobierno inepto y omiso, que no protege a su gente y que ignora las necesidades de seguridad”, expresó Víctor Aispuro, director de la escuela primaria Sócrates, donde Alexander cursaba el cuarto grado.
Como muestra de solidaridad, la comunidad escolar decidió suspender clases el pasado miércoles. Los docentes organizaron un homenaje póstumo al menor, pidiendo a los alumnos asistir con globos blancos en señal de paz y respeto. Este evento antecedió a la marcha que movilizó gran parte de la ciudad, destacando la unión de una sociedad cansada de la violencia.
Gael Antonio y su padre fueron sepultados el martes por la mañana, pocas horas antes de la muerte de Alexander.
La Comisión Estatal de Derechos Humanos de Sinaloa informó que ya inició una investigación para esclarecer el ataque. Mientras tanto, la comunidad exige respuestas y acciones concretas para frenar la creciente violencia en el estado.
Recordemos que este estado y en concreto la capital se convirtió en una “zona de guerra” por los enfrentamientos entre Los Chapitos y Los Mayos, facciones del cartel de Sinaloa que se enfrentan luego de que los primeros traicionaron al Mayo Zambada entregándolo a las autoridades estadounidenses.
