El arzobispo de Puebla, Víctor Sánchez Espinosa, elevó plegarias por diversas causas durante la misa dominical en la Basílica Catedral de Puebla. En primer lugar, expresó sus oraciones por las personas afectadas por los incendios que azotan la región, especialmente en Zacatlán, al norte del estado. Además, no olvidó a los migrantes que han perdido la vida en el trágico naufragio ocurrido en el Mar Mediterráneo. Por último, pidió un esfuerzo conjunto para contrarrestar la violencia y la inseguridad que aquejan a la sociedad.
Durante la celebración religiosa, que estuvo dedicada a Josemaría Escrivá de Balaguer y Albás, fundador del Opus Dei y santo de la Iglesia católica, Sánchez Espinosa dirigió sus oraciones hacia las víctimas del incendio en la Sierra Norte de Puebla. En sus palabras, manifestó su solidaridad con los damnificados de Zacatlán y expresó:
“Me uno, también, a la oración de nuestra iglesia por nuestros hermanos de Zacatlán damnificados por los incendios que se están presentando en esa zona”.
Además, el líder religioso hizo mención a los migrantes que se enfrentan a numerosos peligros en busca de una vida mejor en diferentes partes del mundo. Con tristeza, señaló: “Me uno a la oración de toda la iglesia por los desaparecidos, los que naufragaron en el Mediterráneo, en los días pasados, donde hay cientos de migrantes ahogados y desaparecidos”.
Sánchez Espinosa destacó la importancia de vivir en un entorno seguro y libre de violencia para todos los miembros de la sociedad.
Expresó que los seres humanos, por naturaleza, buscan seguridad y protección ante los peligros y amenazas. Sin embargo, lamentó que el presente esté marcado por la inseguridad, la violencia y el desprecio por la vida. A pesar de ello, resaltó la necesidad de mantener la esperanza y trabajar juntos para lograr un entorno mejor.
El arzobispo poblano hizo hincapié en el agradecimiento hacia el Opus Dei, resaltando su labor en la promoción de la santidad en la vida cotidiana. Sin embargo, es importante mencionar que esta organización religiosa ha enfrentado acusaciones en las últimas décadas relacionadas con proselitismo agresivo, secretismo y la difusión de creencias ultraconservadoras. También se le atribuye la fundación de universidades con el propósito de influir en la política pública desde la perspectiva del Opus Dei.
