Un niño de apenas siete años perdió la vida de manera trágica en la colonia Benito Juárez, ubicada en la junta auxiliar La Resurrección de Puebla capital. El menor, que estaba bajo el cuidado de su padre y la pareja sentimental de este, fue dejado solo y encerrado en el domicilio.
Según el relato de Marisol Rojas Mota, madre del pequeño, el niño sufría de una profunda fobia a los espacios cerrados, lo que lo llevó a intentar salir por una ventana. Durante su intento de escape, el menor rompió el vidrio, lo que provocó heridas graves que le causaron la muerte por desangramiento.
“A mi niño lo dejaron encerrado con llave, y como tenía fobia a estar encerrado, se acercó a la ventana, rompió el vidrio y con eso mismo se cortó. Murió desangrado”, declaró Marisol, entre lágrimas, al describir la desgarradora escena.
El menor había pasado una semana con su padre, como parte del acuerdo entre ambos progenitores. La madre acudió al lugar para recogerlo y llevarlo de regreso a su casa. Sin embargo, al llegar, se encontró con una multitud frente al domicilio y recibió la terrible noticia.
“Ella (la pareja del padre) me llamó para decirme que ya podía ir por mi hijo. Cuando llegué, vi a la gente, corrí, pero ya no pudieron hacer nada”, relató Marisol.
Policías municipales y personal de Protección Civil se presentaron en el lugar de los hechos. Tras confirmar que el menor no presentaba signos vitales, se notificó a la Fiscalía General del Estado para iniciar las investigaciones correspondientes.
El área fue acordonada para realizar las diligencias necesarias, mientras el cuerpo del niño fue trasladado al Servicio Médico Forense para la autopsia.
Marisol exige que las autoridades investiguen no solo las circunstancias de la muerte de su hijo, sino también un presunto caso de maltrato del que el menor habría sido víctima mientras estaba bajo el cuidado de su padre y la pareja de este.
“Quiero justicia para mi hijo. No es justo que lo hayan dejado solo y encerrado sabiendo cómo era. Mi hijo no merecía morir así”, expresó la madre, quien ahora enfrenta la traumatizante experiencia de tener que enterrar a su propio hijo quien se suponía era cuidado por su padre.
