Incertidumbre y tensión se apoderan de Chignahuapan tras la anulación de las elecciones municipales, lo cual provocó una movilización por parte de simpatizantes de Juan Lira Maldonado, quienes inconformes con la resolución del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), tomaron la caseta de pago en la carretera Tlaxco-Tecojotal, exigiendo el respeto al voto emitido el pasado 2 de junio y el retiro de los Concejos Municipales instaurados por el Congreso local luego de la nulidad del proceso electoral.
Los manifestantes aseguran que los integrantes de los Concejos Municipales no tienen conocimiento de las necesidades del municipio y los acusan de tener vínculos con grupos políticos ajenos a la comunidad, señalando que no representan la voluntad del pueblo. Con pancartas y consignas como “El pueblo ya decidió, no más caciques” y “Respeto a la votación”, los manifestantes expresaron su rechazo hacia las figuras designadas, a las que consideran una imposición.
Además, como medida de presión, los simpatizantes de Lira advirtieron que permitirían el libre tránsito de turistas que circulan por la vía, lo que implicaría un golpe económico para la recaudación de la autopista en este tramo. Su objetivo es visibilizar su demanda y ejercer presión para que las autoridades reconsideren la decisión de anular los resultados electorales.
La controversia comenzó el pasado miércoles, cuando la Sala Superior del TEPJF ratificó por segunda ocasión la invalidez de las elecciones municipales de Chignahuapan y Venustiano Carranza, anulando así los triunfos de Juan Lira Maldonado y Marco Antonio Valencia Ávila, quienes ya habían asumido el cargo en dos ocasiones. Tras el fallo, ambos desaparecieron de la escena pública sin emitir comentarios, y fueron sus representantes legales quienes confirmaron que se encuentran evaluando los próximos pasos, incluyendo la posibilidad de contender en las elecciones extraordinarias programadas para el próximo año.
Mientras tanto, la comunidad de Chignahuapan, conocida por su tradición turística y su designación como Pueblo Mágico, vive momentos de incertidumbre, incluso el “Festival Luz y Vida” que llevaba 28 años ininterrumpidos, este año fue cancelado por las protestas de los inconformes.
