Redacción.- Los romeritos son una planta comestible que se prepara con mole, camarones secos, nopales y papas, y que es típica de la cena de Navidad en México. Sin embargo, no todos los mexicanos disfrutan de este platillo, que ha generado una serie de dichos populares que expresan su rechazo o disgusto.
Uno de los más conocidos es “más amargos que los romeritos”, que se usa para referirse a una persona o situación desagradable, ingrata o difícil. Este dicho alude al sabor amargo que tienen los romeritos, que se acentúa con el mole y los camarones.
Otro dicho es “más tiesos que los romeritos”, que se aplica a una persona que es muy tacaña, que no gasta ni presta dinero, o que no tiene recursos económicos. Este dicho se basa en la consistencia dura y fibrosa de los romeritos, que se mantienen firmes incluso después de cocinarse.
Un tercer dicho es “más malos que los romeritos”, que se dice de una persona que es cruel, malvada o dañina, o de una acción que causa perjuicio o sufrimiento. Este dicho se refiere al efecto laxante que pueden tener los romeritos, que provocan cólicos, diarrea o indigestión.
Estos dichos reflejan la opinión negativa que tienen algunos mexicanos sobre los romeritos, que los consideran una comida insípida, pesada o dañina. Sin embargo, también hay muchos mexicanos que aprecian los romeritos, que los valoran por su valor nutricional, su sabor único y su tradición cultural.
Los romeritos son, sin duda, un platillo que divide las preferencias gastronómicas de los mexicanos, y que genera tanto elogios como críticas. ¿Tú qué opinas de los romeritos? ¿Te gustan o los detestas?.
