Las intensas lluvias que azotaron gran parte del país entre el 6 y 9 de octubre dejaron un escenario devastador. Durante la conferencia matutina de este lunes, la presidenta Claudia Sheinbaum confirmó que el número de personas fallecidas aumentó a 64 y hay al menos 65 desaparecidos. Veracruz encabeza la lista de daños: 29 muertos, 18 personas no localizadas y 40 municipios afectados.
La coordinadora nacional de Protección Civil, Laura Velázquez, detalló la situación por estado. En Puebla se registraron 13 fallecidos y cuatro desaparecidos; en Hidalgo, 21 muertos y 43 personas no localizadas. Querétaro reportó una víctima y en San Luis Potosí, aunque hubo daños, no se registraron pérdidas humanas. Según el monitoreo, Veracruz y Puebla llegaron a niveles históricos de lluvia, alcanzando hasta 280 milímetros en algunas zonas.
Durante su visita a las zonas afectadas en Veracruz, Sheinbaum fue recibida con reclamos, pero aseguró que se detuvo a escuchar a las familias. “Donde me reclamaron, ahí me bajé del vehículo”, dijo, y prometió que los apoyos llegarán. También expresó sus condolencias por la muerte de dos estudiantes de la Universidad Veracruzana.
Para canalizar la ayuda, este lunes inició el censo casa por casa a cargo de la Secretaría del Bienestar. Los servidores de la nación registrarán daños en viviendas, pérdidas materiales y condiciones de las familias. Al finalizar, los afectados recibirán un cintillo como comprobante para acceder a apoyos económicos y, posteriormente, a electrodomésticos básicos como refrigeradores, estufas o colchones.
En materia de energía, la Comisión Federal de Electricidad informó que ya se restableció el 84% del suministro eléctrico en los cinco estados afectados. San Luis Potosí ya opera al 100%, mientras que el resto podría normalizarse en las próximas horas. En total, más de 260 mil usuarios resultaron afectados por daños en postes, transformadores y líneas de transmisión.
La infraestructura carretera también sufrió estragos: la Secretaría de Infraestructura y Comunicaciones reportó 132 interrupciones en caminos federales y estatales; 130 ya fueron despejadas. Más de mil kilómetros resultaron dañados y se movilizaron casi 500 trabajadores con maquinaria pesada para liberar escombros.
Las autoridades mantienen activo el número 079 para reportar personas desaparecidas. Mientras tanto, el Gobierno Federal asegura que no bajará la guardia hasta que cada comunidad recupere la calma. Las lluvias se detuvieron, pero la emergencia aún no termina.
