Liberan a jóvenes detenidas por daños a la fuente de San Miguel

Tras pasar casi un día detenidas, cuatro jóvenes activistas fueron liberadas luego de ser acusadas de causar daños a la fuente de San Miguel, en pleno Zócalo de Puebla. Se trata de Vico, Luna, Fernanda y Viridiana, integrantes de los colectivos Mal Habladas Mx, Voces Revolucionarias y Morras Sororas.
Las jóvenes habían participado en una manifestación el sábado 30 de agosto, en el marco del Día Internacional de las Víctimas de Desaparición Forzada. Durante la protesta realizaron intervenciones en la fuente, lo que generó un enfrentamiento con un grupo de mujeres que intentó detenerlas. Minutos después, policías municipales arribaron al lugar y procedieron a asegurarlas.
El Ayuntamiento de Puebla informó que la fuente, construida en 1777, registró desprendimientos en algunas secciones, afectaciones en un injerto previamente reparado, pintura en el tazón exterior y agua teñida con colorantes. Con base en ello, presentó una denuncia formal ante la Fiscalía General de la República (FGR), al tratarse de un bien histórico protegido por ley federal.
La detención se viralizó en redes sociales y colectivos feministas exigieron su liberación inmediata. Activistas como Olimpia Coral también se pronunciaron, mientras familiares denunciaron que las jóvenes fueron golpeadas, incomunicadas y que no fueron presentadas de inmediato ante la autoridad ministerial.
En medio de la presión social, el gobierno estatal, encabezado por Alejandro Armenta, solicitó a la FGR garantizar un proceso con perspectiva de género y respeto a los derechos humanos. “En Puebla privilegiamos el diálogo con todas las organizaciones y expresiones de la sociedad”, indicó en un comunicado. La Secretaría de las Mujeres reiteró el llamado y manifestó preocupación por el caso.
El Ayuntamiento de Puebla señaló que dos abogadas de la Secretaría de Igualdad Sustantiva de Género acudieron a la FGR la misma noche del sábado para asesorar a los familiares. Ahí se logró comunicación con las detenidas, quienes aseguraron encontrarse bien, aunque expresaron temor por la forma en que se realizó su detención. Dos de ellas solicitaron medicamentos, que fueron entregados con receta médica.
Finalmente, la tarde del domingo 31 de agosto se confirmó su liberación. La FGR continuará con las investigaciones para determinar la responsabilidad de las jóvenes por los daños registrados en la fuente de San Miguel durante la protesta.