Este viernes, la Secretaría de Gobernación (Segob) informó que se han identificado los restos del primero de los mineros atrapados en la mina Pasta de Conchos, ubicada en San Juan de Sabinas, Coahuila. Se trata de José Antonio Ordoñez Martínez, uno de los 13 mineros cuyos restos fueron hallados el pasado 12 de junio en una galería de la mina. La identificación fue confirmada por la Fiscalía General de la República.
El colapso de la mina ocurrió el 19 de febrero de 2006, presuntamente debido a una explosión causada por la acumulación de gas metano. En el incidente, 65 de los 73 mineros que trabajaban en ese momento quedaron atrapados. El 12 de junio, el Gobierno federal anunció los primeros hallazgos de restos humanos como parte de las labores de búsqueda en el interior de la mina. De las 65 víctimas, se han recuperado los restos de 13 personas, y dos cuerpos fueron rescatados en 2007.
El 28 de junio, los restos fueron extraídos de la galería de la mina para ser analizados e identificar a cada uno de los mineros fallecidos. La Segob detalló que la identificación se logró tras concluir las acciones periciales correspondientes, con la colaboración del Instituto Nacional de Medicina Genómica (Inmegen), que procesó el material genético de los restos y lo comparó con las muestras de ADN proporcionadas por los familiares de las víctimas.
Grupo México, la empresa a cargo de la mina y propiedad de Germán Larrea, inició los trabajos para rescatar a los 65 mineros atrapados. En abril de 2007, catorce meses después del accidente, solo se lograron recuperar los cuerpos de Felipe de Jesús Torres Reyna y Manuel Peña Saucedo. Posteriormente, la empresa suspendió las labores de búsqueda y rescate.
La Secretaría de Gobernación (Segob) informó este viernes que se han identificado los restos del primer minero atrapado en la mina Pasta de Conchos, en San Juan de Sabinas, Coahuila. Los restos corresponden a José Antonio Ordoñez Martínez, uno de los 13 mineros cuyos restos fueron descubiertos el 12 de junio en una galería de la mina. La identificación fue confirmada por la Fiscalía General de la República.
El colapso de la mina ocurrió el 19 de febrero de 2006, presuntamente por una explosión causada por la acumulación de gas metano, atrapando a 65 de los 73 mineros que se encontraban trabajando en ese momento. El 12 de junio, el Gobierno federal anunció los primeros hallazgos de restos humanos durante las labores de búsqueda en el interior de la mina. Hasta ahora, se han recuperado los restos de 13 víctimas, además de dos cuerpos rescatados en 2007.
El 28 de junio, los restos fueron extraídos de la galería de la mina para ser analizados e identificar a cada uno de los mineros fallecidos. La Segob detalló que la identificación se logró tras completar las acciones periciales correspondientes, con la colaboración del Instituto Nacional de Medicina Genómica (Inmegen), que procesó el material genético de los restos y lo comparó con las muestras de ADN proporcionadas por los familiares de las víctimas.
Grupo México, la empresa responsable de la mina y propiedad de Germán Larrea, inició los trabajos de rescate de los 65 mineros atrapados. En abril de 2007, catorce meses después del accidente, se lograron recuperar los cuerpos de Felipe de Jesús Torres Reyna y Manuel Peña Saucedo. Posteriormente, la empresa suspendió las labores de búsqueda y rescate.
