La FEADLE, unidad especializada de la FGR, consiguió que un juez vinculara a proceso a Irene Olea Torres, exalcaldesa de Izúcar de Matamoros, por el delito de intimidación. Sin embargo, quedó fuera de esta imputación el cargo por falsificación de documentos relacionado con la detención de las comunicadoras Natalie y Michelle Hoyos López.
Tras una audiencia maratónica de más de cuatro horas, Michelle Hoyos aclaró que, aunque Olea evitó ser procesada por falsificación, las medidas cautelares en su contra siguen vigentes: tiene prohibido acercarse a las periodistas o a los testigos del caso.
El juez admitió pruebas que vinculan a la exfuncionaria con el despido e intimidación de tres empleadas del ayuntamiento que apoyaron a las reporteras, entre ellas Socorro Barrera, asesinada el 20 de junio de 2024. El tribunal ordenó ampliar la investigación, que deberá concluir en agosto.
Restricciones y próximos pasos
Como parte de las medidas cautelares, Olea Torres deberá firmar periódicamente ante las autoridades, no puede salir del país y tiene vedado cualquier contacto con las víctimas. La decisión judicial surge tras los hechos de 2023, cuando las hermanas Hoyos López fueron detenidas, agredidas y torturadas por presuntas órdenes de la entonces alcaldesa.
Aunque inicialmente se le investigó por tortura, solo prosperó el delito de intimidación. Sin embargo, la exedil aún enfrenta una audiencia en agosto por falsificación de documentos, relacionada con los policías que participaron en la detención de las periodistas.
Los incidentes ocurrieron el 10 de marzo de 2023. Según las periodistas, los agresores actuaron bajo instrucciones de Olea, quien días después responsabilizó al exsecretario de Educación Melitón Lozano, acusándolo de amenazarla de muerte. El caso sigue abierto, con la posibilidad de que nuevos cargos se sumen en las próximas semanas.
