En domingo de Domud, el arzobispo pidió por las personas afectadas por las inundaciones

La mañana de este domingo se celebró la misa correspondiente al vigésimo noveno domingo del Tiempo Ordinario, encabezada por el arzobispo Víctor Sánchez Espinosa. Desde el inicio, dirigió un saludo especial a quienes viven con enfermedad o se encuentran en edad avanzada, recordándoles que forman parte fundamental de la comunidad.
La jornada coincidió con el Domingo Mundial de las Misiones, conocido como “Domund”, una fecha en la que la Iglesia dedica sus oraciones y esfuerzos a quienes llevan su labor evangelizadora a distintos rincones del mundo. Por esta razón, dos sacerdotes encargados del acompañamiento a misioneros en México y Puebla participaron en la concelebración.
Tras el acto penitencial, el arzobispo invitó a los asistentes a reconocer sus errores y encomendarse a la misericordia divina. En su homilía, habló sobre la importancia de mantener la fe en todo momento, no sólo en medio de la adversidad, sino también en los días tranquilos. Recordó que la misión de la Iglesia es estar cerca de quienes atraviesan situaciones difíciles y prestar atención a quien necesita ser escuchado.
Retomando palabras del Papa Francisco, hizo un llamado a ser una Iglesia que camina y acompaña, una Iglesia que actúa como madre para todos. Pidió oraciones por hombres y mujeres que dedican su vida a la misión, así como por las comunidades a las que llegan.
También elevó oraciones por las intenciones del Papa León XIV y por las personas afectadas por las recientes inundaciones en distintos estados del país, especialmente en la Sierra Norte. Mencionó a quienes han perdido a un familiar o su patrimonio, deseándoles fortaleza y consuelo.
Finalmente, informó que del 6 al 9 de noviembre se llevará a cabo el Congreso Nacional Misionero en el Centro Expositor, evento que reunirá a participantes de diversas regiones de México para compartir experiencias y proyectos relacionados con la labor pastoral en el país.