El estado de clínico del Papa Francisco es estable: El Vaticano
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El papa Francisco continúa su recuperación en el Policlínico Gemelli de Roma, donde pasó una noche tranquila, según informó Matteo Bruni, portavoz del Vaticano. Durante la mañana, el pontífice aprovechó el tiempo para leer la prensa y mantenerse al tanto de la actualidad, en lo que ya es su quinto día de hospitalización a causa de una “infección polimicrobiana del tracto respiratorio”.
Bruni adelantó que se espera un nuevo informe médico a lo largo del día para actualizar el estado de salud del papa. El último reporte, emitido el lunes, describía una situación de salud compleja, lo que llevó a los médicos a ajustar el tratamiento y extender su permanencia en el hospital.
La agenda de Francisco ha quedado suspendida al menos hasta el próximo domingo. Entre los eventos que sufrirá cambios se encuentra la misa por el Jubileo de los Diáconos, en la que el cardenal Rino Fisichella, responsable del dicasterio para la Evangelización, será quien presida la celebración. Por ahora, no se ha confirmado si el pontífice participará de alguna manera en el tradicional rezo del ángelus dominical.
Durante su estancia en el hospital, el papa cuenta con el apoyo de sus dos secretarios personales, quienes le han llevado documentos y periódicos para que pueda continuar con algunas de sus tareas cotidianas. A pesar de su disposición para trabajar, los médicos le han recomendado guardar reposo absoluto para favorecer su recuperación.
Incluso desde la habitación del hospital, Francisco mantiene su cercanía con diversas comunidades. La noche anterior, contactó telefónicamente a la parroquia de la Sagrada Familia en Gaza, la única iglesia católica en ese territorio. El sacerdote argentino Gabriel Romanelli, párroco del lugar, compartió con medios italianos detalles sobre la llamada, en la que el papa expresó su solidaridad con los fieles y su interés por la situación en la región.
La salud de Francisco, de 87 años, ha sido motivo de atención en los últimos meses debido a diversos problemas respiratorios que han requerido seguimiento médico. Sin embargo, el pontífice ha continuado con su labor pastoral y sus encuentros públicos, mostrando su compromiso con la Iglesia y con las distintas comunidades que buscan su cercanía y apoyo.
En los pasillos del Gemelli, la presencia del papa no pasa desapercibida. Algunos visitantes se detienen a preguntar por su estado y a enviar mensajes de ánimo. Por ahora, todo indica que el equipo médico mantiene un monitoreo constante, evaluando día a día su evolución para determinar el momento adecuado de su alta hospitalaria.
Mientras tanto, el Vaticano sigue ajustando la agenda y manteniendo a la comunidad católica informada sobre el estado del papa Francisco, quien, pese a la hospitalización, no ha dejado de mantener su mirada puesta en las necesidades de los demás, incluso a la distancia y desde una cama de hospital.