Alberto R., un joven de apenas 15 años de edad, es el estudiante que en realidad evitó que uno de sus compañeros siguiera atacando a uno de los profesores de la Prepa Upaep con un martillo, en un caso que ha causado inconformidad en la comunidad estudiantil.
A través de redes sociales, varios alumnos del plantel ubicado en el Barrio de Santiago reprocharon que la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla (Upaep) este minimizando lo ocurrido este jueves en las instalaciones educativas.
“Aguas Upaep, porque toda la comunidad ya se está preparando para pedirte que digas la verdad de los hechos ocurridos. #upaepdejadementir #upaepnointentescallarnos”, expuso en redes una estudiante.
Además de ese testimonio, hubo otros perfiles que coincidieron en que la institución educativa está tratando de ocultar lo que en verdad ocurrió, señalando que fue un intento de homicidio y un intento de suicidio.
Aunque las autoridades educativas aseguraron que el estudiante agresor no se intentó suicidar, los estudiantes sostienen que este episodio si ocurrió, por lo que lamentaron que la Upaep preste más atención a los códigos de vestimenta que a la salud mental de los jóvenes.
“Síguete preocupando más por tus códigos de vestimenta que por la salud mental de tus alumnos UPAEP”, expuso otra usuaria que además agregó que “Encubriendo la situación es cómo quieres seguir tu lema de ‘líderes transformadores’ UPAEP”.
La versión oficial de los hechos señala que el profesor atacado, solamente resultó con un rasguño en un brazo tras ser atacado espontáneamente por un alumno con un martillo.
Sin embargo, los alumnos manifestaron que la universidad no ha hecho mención de que en realidad fue un alumno de nombre Alberto R., quien intervino para detener a su compañero y evitar que continuara agrediendo al maestro.
“Poco se habla de los huevos del alumno Alberto, el cual fue el primero que se metio para tomar al chico que ataco, arriesgando su salud fisica para poder salvar la vida del maestro, y ahora el shhh calladito y en silencio”, expusieron.
De forma interna, los alumnos no descartan realizar una movilización para que la institución les ofrezca garantías de que hay protocolos para brindar seguimiento y atención preventiva de crisis de salud mental, además de que reconozcan la gravedad de lo ocurrido.
