La tarde del domingo los habitantes de la colonia Villa del Roble en Chilpancingo, Guerrero, fueron testigos de una terrorífica escena cuando localizaron la cabeza de Alejandro Arcos, alcalde de la ciudad, sobre una camioneta blanca.
El cuerpo del funcionario, que apenas llevaba seis días en el cargo, fue encontrado dentro del mismo vehículo. Arcos, representante de la coalición PRI-PAN-PRD, había asumido el puesto el 1 de octubre, en medio de la crisis provocada por las inundaciones del huracán John.
El dirigente nacional del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Alejandro Moreno Cárdenas, lamentó profundamente el asesinato de Arcos, así como del secretario del Ayuntamiento, Francisco Tapia. Ambos funcionarios, reconocidos por su juventud y honestidad, tenían menos de una semana desempeñando sus labores cuando fueron brutalmente asesinados. Moreno subrayó el compromiso de los fallecidos con el desarrollo de su comunidad.
Han asesinado a nuestro alcalde de Chilpancingo, Alejandro Arcos, y hace apenas tres días al secretario de este mismo Ayuntamiento, Francisco Tapia.
Llevaban menos de una semana en el cargo. Funcionarios jóvenes y honestos que buscaban progreso para su comunidad.
Nuestro pésame…— Alejandro Moreno (@alitomorenoc) October 7, 2024
“Han asesinado a nuestro alcalde de Chilpancingo, Alejandro Arcos, y hace tan solo tres días, al secretario del Ayuntamiento, Francisco Tapia”, recordó Moreno, expresando su dolor.
El líder del PRI ofreció sus condolencias a las familias de las víctimas y destacó la necesidad de una intervención federal en el caso. Ante la situación de violencia que afecta al estado, Moreno solicitó a la Fiscalía General de la República (FGR) que atraiga las investigaciones correspondientes.
El secretario del Ayuntamiento, Francisco Gonzalo Tapia, había sido ejecutado el 3 de octubre en pleno Zócalo de Chilpancingo. Ahora, el asesinato del alcalde marca otro duro golpe para la capital guerrerense.
