Coca-Cola podría aumentar su precio hasta un 10%

En 2026, los consumidores mexicanos podrían enfrentar un aumento de hasta el 10% en el precio de la Coca-Cola y otras bebidas saborizadas, como resultado de un nuevo Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS) propuesto por el gobierno. Este gravamen busca desincentivar el consumo de productos con alto contenido de azúcar y edulcorantes no calóricos, en un esfuerzo por combatir problemas de salud pública como la obesidad y la diabetes.
De acuerdo con Arca Continental, una de las principales embotelladoras de Coca-Cola en México, el impacto del impuesto será significativo, aunque confían en que eventos como el Mundial de Fútbol y el centenario de la marca en el país puedan mitigar parcialmente la caída en la demanda. Sin embargo, el director ejecutivo de The Coca-Cola Company, James Quincey, reconoció que el gravamen tendrá repercusiones económicas a corto plazo.
Actualmente, una botella de Coca-Cola de 600 ml tiene un precio promedio de 18 pesos, pero con el aumento proyectado próxima alcanzar los 20 pesos o más. Este ajuste no solo afectará a los consumidores, sino también a pequeños comerciantes, quienes podrían ver una disminución en sus ventas debido al encarecimiento del producto.
El debate sobre el impacto de este tipo de impuestos continúa dividiendo opiniones. Mientras algunos sectores aplauden la medida como un paso hacia una sociedad más saludable, otros critican que el aumento de precios afecta principalmente a las familias de menores ingresos, quienes destinan una parte significativa de su presupuesto a este tipo de productos.
Se espera que en los próximos meses se definan los detalles de la implementación del impuesto, así como las estrategias de las empresas para adaptarse a este nuevo escenario económico.






