Dámaso López Serrano, conocido como “El Mini Lic”, fue arrestado este viernes 13 de diciembre en Virginia, Estados Unidos, bajo cargos relacionados con el tráfico de fentanilo. Su detención marca un nuevo capítulo en la historia del crimen organizado mexicano, ya que “El Mini Lic” había sido liberado bajo condiciones en 2022 tras colaborar con las autoridades estadounidenses.
López Serrano, quien había sido condenado a casi cinco años de prisión por su implicación con el Cártel de Sinaloa, fue puesto en libertad condicional después de su cooperación en el juicio contra Joaquín “El Chapo” Guzmán, líder de la organización criminal. En su momento, su testimonio fue clave para las autoridades en el proceso judicial contra Guzmán Loera, quien está cumpliendo una condena de cadena perpetua en EE.UU.
La captura de López Serrano también pone de relieve su presunta vinculación con el asesinato del periodista Javier Valdez, ocurrido en 2017. Aunque la investigación está en curso, se le señala como uno de los posibles responsables intelectuales del crimen, hecho que agudizó su perfil dentro de la jerarquía del cártel.
El arresto de “El Mini Lic” se produce en un contexto de creciente vigilancia sobre las redes de tráfico de fentanilo, una droga sintética que ha devastado comunidades en Estados Unidos. El fentanilo, cuya producción y distribución se ha incrementado en los últimos años, es uno de los principales focos de atención de las autoridades federales.
La historia de Dámaso López Serrano está marcada por la cooperación con la justicia, pero también por las sombras de su implicación en actividades delictivas. Tras la detención de su padre, Dámaso López Núñez, “El Licenciado”, en 2017, “El Mini Lic” se entregó a las autoridades estadounidenses y colaboró en el esclarecimiento de varias operaciones del Cártel de Sinaloa.
La salida de su padre de prisión también estuvo rodeada de controversia, dado que fue un miembro cercano de El Chapo y compartió información clave sobre las facciones del cártel, en particular sobre los hijos de Guzmán Loera, conocidos como “Los Chapitos”.
