Puebla, Pue.- Aunque hasta el momento no hay personas detenidas, la Fiscalía General del Estado señala que hay avances en la investigación de los hechos ocurridos el pasado lunes en el municipio de Atlixco, donde dos policías municipales y un civil fueron ejecutados por un comando armado.
Contrario a las primeras versiones, la Fiscalía determinó que los responsables ejecutaron primero a los policías municipales cuando estos se encontraban a bordo de su patrulla, resguardando las instalaciones del hospital Gonzalo Río Arronte en la demarcación.
Dos hombres y una mujer descendieron de una camioneta Honda CR-V con placas de Guerrero y comenzaron a disparar con fusiles de asalto AK-47, también conocidos como cuerno de chivo, privando de la vida a Guadalupe, de 30 años; y a Armando, de 34.
Posteriormente ingresaron al hospital, ella sometió al vigilante y sus cómplices al médico de guardia, obligándolo a revelar dónde se encontraba un paciente que había ingresado con heridas de bala.
Al llegar a la Enfermería, acribillaron a Juan Carlos Hurtado de 32 años de edad, frente a su madre; en el lugar se encontraron al menos 19 cartuchos percutidos calibre 7.62.
Cuando los sicarios salían del nosocomio, llegaron elementos de la Policía, que acudían en apoyo de sus compañeros asesinados y fueron recibidos a balazos, resultando un enfrentamiento del que se reportan dos patrullas afectadas.
También se informó que en ese momento los responsables abandonaron la camioneta con placas de Guerrero en la que llegaron, y robaron dos vehículos que estaban en el estacionamiento del nosocomio, un Chevy de color gris y una camioneta Nissan Frontier.
En los alrededores del hospital, la FGE aseguró 128 cartuchos percutidos de cuerno de chivo y .9 milímetros.
La Fiscalía General del Estado confirmó que Juan Carlos Hurtado celebró su cumpleaños en una casa de campo ubicada en San Diego Acapulco, perteneciente al municipio de Atlixco, lugar donde fue víctima de un primer ataque el domingo en la noche.
En sus primeras declaraciones señaló que hombres encapuchados, llegaron al inmueble en una motocicleta y comenzaron a disparar un arma larga de grueso calibre, resultando herido en el pecho y en una pierna.
Familiares y amigos se hicieron cargo de su traslado al Hospital General de Atlixco donde horas después las mismas personas que habían intentado asesinarlo, lo remataron.
Se ha logrado identificar al menos a tres responsables (dos hombres y una mujer), pero se estableció que participaron más personas en estos hechos.
Los vehículos robados en el hospital, fueron abandonados y asegurados más tarde, en San Jerónimo Tecuanipan.
Cabe señalar que en la casa de campo rentada por Juan Carlos Hurtado, se llevó a cabo una inspección relacionada con la investigación por el delito de lesiones.
Se encontraron un BMW, una camioneta RAM y un Jeep Grand Cherokee con impactos de bala, manchas de sangre, una bolsa con marihuana y más de 60 cartuchos de diferentes calibres.
La FGE no confirmó las versiones de que el civil ejecutado en el hospital formaba parte de una banda dedicada al robo de vehículos con mercancía o la venta de droga, pero tampoco se está descartando en las pesquisas.