En los últimos años se han popularizado las asistentes llamadas Alexa o Echo, seguro que has escuchado hablar de ellas. Sin embargo, estas tecnologías pueden resultar ser muy peligrosas, ya que recopilan muchos datos personales sobre nuestros hábitos, rutinas, gustos, etc.
Un caso en el Reino Unido pone en evidencia este tipo de tecnologías. Una mujer ha sido condenada por aprovechar que la casa de su expareja estaba parcialmente automatizada de manera que puedes controlar diversos aparatos de forma remota y automatizar tareas del hogar para asustar a la nueva novia de su expareja.
Según informa la BBC, Philippa Copleston Warren accedió a los altavoces de Amazon Echo de su exnovio para decirle a su nueva novia que se marchara de la casa, mientras Philippa se encontraba 160 kilómetros de la vivienda de su ex. Además, con el objetivo de asustar a la pareja, la mujer también encendió y apagó de forma remota las luces del dormitorio.
Se ha declarado culpable, pues conocía las contraseñas de la cuenta de Amazon Alexa de su exnovio y también la de su perfil de Facebook. Así que la mujer aprovechó esta información para entrar en la cuenta de Facebook de su exnovio, subir una foto suya completamente desnudo con el comentario: “Mi pregunta del día: ¿salgo gordo?”.
Momentos después el se dio cuenta al recibir mensajes de sus amigos preocupados por la situación.