Bangkok.– A pocos días de iniciar la edición 74 de Miss Universo, una fuerte polémica sacudió el concurso luego de que Nawat Itsaragrisil, director de Miss Universo Tailandia, insultara a la mexicana Fátima Bosch, llamándola “tonta” durante una reunión con las concursantes.
El altercado ocurrió en una sesión preliminar en Bangkok, donde el también presidente de Miss Grand International cuestionó a la representante mexicana por supuestamente no hacer publicaciones sobre el certamen. Bosch intentó aclarar el malentendido, pero fue interrumpida. “¿Vas a seguir nuestras indicaciones o no?”, le dijo Itsaragrisil antes de pedir a seguridad que la retiraran del lugar.
El gesto provocó inconformidad entre las demás participantes, quienes defendieron a Fátima. La mexicana, visiblemente molesta, respondió: “Todas las delegadas, como mujeres, merecemos respeto. Estoy aquí representando a un país y no es mi culpa que usted tenga problemas con mi organización”.
Fuera del recinto, la modelo tabasqueña habló con los medios y relató que el trato del directivo fue “humillante e injusto”. “Me llamó tonta porque tiene problemas con mi organización. Eso no es correcto. He sido respetuosa desde que llegué y no merezco ese trato”, declaró Bosch, quien además subrayó: “Nadie puede callar nuestra voz. Si algo te quita la dignidad, tienes que irte”.
Ante la controversia, la organización de Miss Universo emitió un comunicado en el que aseguró mantener “los más altos estándares de respeto, seguridad e integridad” y anunció el envío de una delegación especial a Tailandia para “garantizar un entorno profesional y seguro para todas las concursantes”.
Miss Universo México respaldó a Fátima Bosch con un mensaje contundente en redes: “Lo que sucedió hoy es inaceptable. Ninguna mujer merece ser insultada. Hoy y siempre, México está contigo, Fátima”.
También otras participantes expresaron su apoyo. La modelo danesa Victoria Kjær escribió en sus historias: “Defenderte no siempre es fácil, pero es uno de los actos más grandes de respeto propio y fortaleza”.
El incidente ha desatado una ola de críticas hacia la organización tailandesa y reaviva el debate sobre el trato hacia las concursantes en certámenes internacionales de belleza.
