La tormenta tropical Lorena se transformó en huracán categoría 1 durante la madrugada de este miércoles mientras avanza frente a la península de Baja California Sur. De acuerdo con la Conagua, mantiene vientos sostenidos de 120 km/h y rachas que alcanzan hasta 150 km/h, con un desplazamiento hacia el noroeste a 24 km/h.
El fenómeno se ubicaba por la mañana a unos 165 kilómetros al suroeste de Cabo San Lucas y a 345 kilómetros al sur-sureste de Cabo San Lázaro. Según los pronósticos, podría intensificarse a categoría 2 en las próximas horas y tocar tierra en el occidente de la península el viernes por la mañana, para después avanzar hacia las costas de Sonora el sábado.
Los efectos del ciclón ya comienzan a sentirse. En Baja California Sur se prevén lluvias intensas, al igual que en regiones de Sonora y Sinaloa. En estados como Baja California, Nayarit y Jalisco, las precipitaciones serán muy fuertes, mientras que las rachas de viento podrían llegar a los 120 km/h en las costas de Baja California Sur. El oleaje también representa un riesgo, con alturas superiores a cinco metros.
El Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos (NHC) confirmó que el sistema mantiene fuerza y advirtió que su trayectoria podría variar si permanece más tiempo sobre el Pacífico. Actualmente, el huracán se mueve paralelo a la costa occidental de la península, lo que mantendrá las lluvias en la región hasta el viernes.
Las previsiones indican acumulaciones de hasta 100 milímetros de agua en estados del noroeste, desde Colima hasta Sinaloa, con posibilidad de inundaciones repentinas en algunas zonas. Para el jueves, las bandas nubosas alcanzarán el suroeste de Sonora y se espera que la intensidad de las precipitaciones aumente.
Protección Civil mantiene zonas de prevención y vigilancia en distintas localidades de Baja California Sur y Sonora. Las autoridades llaman a la población a mantenerse informada y seguir las recomendaciones oficiales ante los riesgos por lluvias, vientos y oleaje elevado.