Puebla, Pue.- Los cadáveres de dos hombres, uno de ellos elemento de una Policía Municipal en el estado de Hidalgo, fueron localizados en una fosa clandestina ubicada en el municipio de Chignahuapan, confirmó la Fiscalía General del Estado.
Aunque se presume que ambas víctimas eran originarias de la vecina entidad, los homicidios habrían ocurrido en territorio poblano a decir del fiscal Gilberto Higuera Bernal.
Y es que se determinó que una de las víctimas fue ultimada a balazos, uno de ellos en la cabeza, pero la otra, fue enterrada viva de acuerdo con los resultados de las pruebas periciales.
La persona ultimada a balazos fue identificada como Gonzalo Joaquín Vega García, de 27 años, quien estaba reportado como desaparecido y laboraba como elemento de la Policía Municipal de Almoloya, Hidalgo; la otra víctima no ha sido identificada.
La fosa clandestina fue localizada en un paraje despoblado de la localidad de El Paredón, en Chignahuapan, cerca de los límites con el estado de Hidalgo.
Hasta el momento, se desconoce el móvil del crimen y la identidad de los responsables.