Redacción.- Escenas de violencia policial, barricadas, detenciones, destrucción de edificios oficiales, vandalismo, opresión, todo ello se vive en Chile, en la última semana se han visto escenas que son un contexto son difíciles de entender.
Aquí te dejamos algunas claves para entender la crisis del hermano país latinoamericano.
- El pasado 6 de octubre, el Metro de Santiago, una empresa privada en cuya propiedad participa el Estado chileno, aumentó en 30 pesos el precio del ticket en hora punta, hasta situarse en 830 pesos (unos 1,2 dólares).
- En respuesta surgió el #EvasiónTodoElDía que unió a miles de ciudadanos, en especial estudiantes de secundaria y universitarios, para realizar entradas masivas al suburbano y levantaron las mamparas de cobro para que los pasajeros ingresasen a los andenes sin pagar.
- Las protestas subieron de tono desatando choques contra los representantes del Estado, derivando en choques violentos y destrozos de mobiliario, lo que fue aprovechado por el gobierno para “montar escenas de vandalismo” para volcar la opinión pública en contra de las manifestantes.
- Para el viernes de es semana la situación era incontrolable, por lo que Metro de Santiago, que transporta diariamente casi 3 millones de personas, decretara el cierre de todas las estaciones, lo que produjo el colapso del tránsito, con atasco de vehículos, autobuses sobrepasados por la demanda de viajeros y peatones caminando en masa por las calles.
- Las protestas ya violentas en respuesta al excesivo uso de la fuerza por parte de los carabineros, intentan ser reprimidas mediante la invocación por parte del Gobierno chileno a ley de seguridad del Estado, una legislación que regula los delitos contra la seguridad interior del país y que endurece las penas para aquellos que resulten culpables de los desórdenes y disturbios.
- La respuesta ante ello, más violencia, enfrentamientos directos con los Carabineros, barricadas, saqueos en comercios, la quema y destrozo de varias estaciones de metro, de autobuses y de mobiliario urbano, e incluso incendiando la sede de la eléctrica Enel.
- El presidente del país, Sebastián Piñera, en la madrugada del sábado, decretó Estado de emergencia para gran parte de Santiago de Chile, lo que supone confiar a un mando militar la seguridad de la zona e implica una restricción la libertad de locomoción y reunión por un plazo 15 días.
- Así, el presidente nombró al general de división Javier Iturriaga del Campo como jefe de la Defensa Nacional para controlar la situación, y éste declaró el Toque de queda en Santiago desde las 22 horas hasta las 07 de la mañana. Generando más molestia y escenas de abuso de autoridad.