Luego de que dos jóvenes estudiantes de Derecho fueran detenidos afuera del Cereso de San Miguel, tras ser acusados de tener nexos con la banda del narcomenudista Juan L. alias “El Moco”, familiares de las víctimas denunciaron que el delito por el que se les acusa, fue fabricado por la Policía Estatal de Puebla.
A través de redes sociales familiares de Fernando Gazano Tolentino de 23 años y Zahid Estrada Gazano, de 19 años de edad, estudiantes de Derecho en la Universidad Anáhuac en el Estado de México y del Centro de Estudios Superiores en Ciencias Jurídicas y Criminológicas en Nuevo León, acusaron a autoridades policiales de fabricar delitos en contra de los jóvenes, que son primos de parentesco.
Claudia Gazano, mamá de Zahid Estrada Gazano, relató en redes sociales que su hijo acompañó a su primo el pasado 20 de diciembre de 2020, a las instalaciones del Cereso de San Miguel a dejar documentos por un caso del bufete para el que trabajan.
Sin embargo en ese momento llegó un operativo de la Policía Estatal, con agentes uniformados y otros vestidos de civil, por lo que a partir de ese momento los jóvenes fueron arrestados y quedaron incomunicados.
No obstante familiares tuvieron conocimiento de esto hasta el día siguiente, en el que la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) Estatal emitió el boletín 726, dando cuenta de su aprehensión junto con cuatro personas más.
Hasta el momento los jóvenes se encuentran internados en un área de máxima seguridad del Penal de San Miguel, luego de que un Juez de Control calificara de legal su detención por delitos contra la salud, informó la mamá de Zahid y tía de Fernando.
De acuerdo a la carpeta de investigación al momento de su detención Fernando y Zahid fueron asegurados junto con Gersaín D.C.; Mónico L.D.; Carlos Ignacio G.; y José Guadalupe L. M., este último hermano del presunto líder criminal de la Sierra Norte, Juan L. alias “El Moco”.
Los seis detenidos fueron ubicados a bordo de una camioneta Jeep Grand Cherokee, un vehículo Volkswagen Jetta y un Mercedes Benz GLK 300 en el Camino al Batán, en posesión de cuatro armas de fuego, dos calibre .380 y dos calibre 40, además de 191 dosis de la drogas conocida como cristal, 10 dosis de cocaína, 10 dosis de heroína y 8 teléfonos celulares.
Sin embargo, mediante un video que circula en redes sociales, la mamá de Zahid declaró que su hijo y sobrino eran ajenos al delito que se les está incriminando y que están siendo bloqueados por personal de la Fiscalía General del Estado (FGE), ya que a través del Agente del Ministerio Público se les ha impedido acceder a la carpeta de investigación.
Ayer se llevó a cabo la audiencia de vinculación a proceso, de la cual se desconoce el resultado, no obstante, desde la semana pasada los jóvenes se encuentran recluidos en el Cereso de San Miguel.
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“Estamos afuera del penal de Puebla, ni siquiera nos dan una información, los tienen en un módulo de máxima seguridad, no debe de ser así, no hay una determinación que diga que ellos sean unas personas de alta peligrosidad (…) Nosotros tenemos todos los medios de prueba, desafortunadamente el Ministerio Público no nos quiere dar acceso a los registros de investigación”, señaló Claudia Gazano.
