José Guadalupe Casas Rodríguez, conocido en Salvatierra como Don Nico, perdió la vida este sábado tras permanecer varios días hospitalizado por un ataque armado mientras realizaba una transmisión en vivo. El comerciante, dedicado desde hace años a la venta de helados y a documentar problemáticas comunitarias, fue agredido el pasado martes por dos hombres a bordo de una motocicleta mientras recorría un camino rural para denunciar su deterioro. La transmisión quedó activa y registró el momento en que pidió ayuda y se despidió de su familia.
#Viral 😱 “Te amo, cuida a mis niños, mi amor; me mataron aquí en la salida a Morelia, se me está yendo el aliento, te amo (…) cuida a mis hijos, edúcalos, estoy tirado aquí en el campo, te amo”. Así se despedía de su pareja un hombre que fue baleado durante una transmisión en… pic.twitter.com/7MCY6ibwuh
— Callejero Noticias (@CallejeroPue) October 8, 2025
El ataque ocurrió cuando mostraba los baches de la carretera que conecta a la comunidad de Urireo con Morelia desde su página Helados Don Nico. Durante la grabación expresó su preocupación por las consecuencias de sus denuncias. Poco después recibió tres disparos en la pelvis, glúteo y pierna. Fue trasladado al Hospital General de Celaya, donde permaneció en estado crítico hasta su fallecimiento.
El Gobierno Municipal de Salvatierra confirmó su muerte mediante un comunicado en el que expresó condolencias a sus familiares y aseguró que el caso no quedará sin seguimiento. Aunque la autoridad local señaló que no habrá impunidad, hasta el momento no se ha informado sobre posibles detenidos o líneas de investigación.
El alcalde José Daniel Sámano reconoció que el ataque ha incrementado la tensión en el municipio, considerado uno de los más violentos de Guanajuato. Incluso reveló que él mismo recibió amenazas después del hecho y tuvo que abandonar el territorio temporalmente. Pese a ello, el Ayuntamiento reiteró su compromiso de mantener las acciones de seguridad.
La muerte de Don Nico generó una amplia reacción entre los habitantes de Urireo y comunidades cercanas. Vecinos, amigos y usuarios de redes sociales difundieron mensajes en los que recuerdan su labor como ciudadano activo y su participación constante en actividades locales. También demandan mayor vigilancia en las zonas rurales y garantías para quienes realizan denuncias públicas.
Las investigaciones permanecen abiertas por parte de autoridades municipales y estatales. Mientras tanto, la transmisión donde quedó registrado el ataque sigue circulando en plataformas digitales y se ha convertido en evidencia clave del hecho.
